(vía EcoAvant) La localidad alemana de Andernach sustituye sus zonas verdes tradicionales por huertos cuidados por los vecinos, que pueden llevarse gratuitamente los productos cosechados. Cuando Thomas Manz quiere cocinar unas verduras u hortalizas, coge su cesto, sale a la calle y las recolecta en alguno de los espacios públicos de su localidad, Andernach, una población de unos 30.000 habitantes al norte del estado alemán de Renania-Palatinado. Se hace con una col, unos calabacines o cualquier otro producto que ya esté en su punto y se los lleva a su cazuela. “Vengo un par de veces por semana y me dejo inspirar por lo que encuentro”, dice.